La Cruz Roja "fantasma" de Axtla: elefante blanco con domicilio conocido
Axtla.- Anunciada con bombo y platillo durante la administración municipal pasada, la delegación de la Cruz Roja en Axtla de Terrazas prometía ser un parteaguas en los servicios de emergencia y atención prehospitalaria para la localidad. Incluso, como símbolo del compromiso institucional, se le cedió un espacio dentro del edificio del Sistema Municipal DIF. Hoy, un año después, el único parteaguas evidente es el que divide la promesa de la realidad.
El inmueble, que alguna vez fue motivo de discursos, aplausos y fotografías oficiales, luce ahora como un auténtico "elefante blanco", silencioso y abandonado, como si esperara una ambulancia que nunca llegó. Ni sirenas, ni paramédicos, ni camillas. Sólo paredes vacías que sirven, con suerte, para resguardar telarañas y nostalgia.
Vecinos del lugar comentan con ironía que "la Cruz Roja de Axtla debe tener poderes sobrenaturales, porque nadie la ha visto, pero todos saben que existe... al menos en papel". Otros sugieren que tal vez la delegación funciona en modo "ninja", pues no hace ruido, no se ve, pero ahí está... en teoría.
Cabe recordar que el anuncio de esta sede local fue presentado como un avance histórico para el municipio. Sin embargo, pasaron los meses y la famosa Cruz Roja nunca arrancó operaciones. No hubo personal asignado, ni ambulancias, ni equipo médico, ni siquiera una campaña para captar voluntarios. Lo único que quedó fue el letrero, la promesa y, claro, el espacio cedido, que sigue esperando alguna utilidad.
Actualmente, en caso de emergencias, los ciudadanos deben seguir dependiendo de ambulancias del hospital comunitario, bomberos voluntarios o, en muchos casos, del clásico "llevar al paciente como se pueda". La famosa Cruz Roja de Axtla, en tanto, permanece como un recordatorio de que no todo lo que se anuncia con entusiasmo termina en hechos. Algunas cosas, simplemente, se evaporan después del corte de listón.
Pero no todo está perdido. El espacio podría reciclarse como centro cultural, sala de espera eterna o museo de las promesas incumplidas. Total, Axtla ya puso el local... solo falta que alguien, algún día, le ponga corazón (y personal, equipo, ambulancia y funcionamiento).